Esta semana tuvo lugar en Pinar del Río la reunión anual de análisis y proyección del béisbol, que contó con la presencia de Heriberto Suárez, presidente de la Comisión Nacional de ese deporte.

La cita, que reunió a entrenadores, activistas y glorias deportivas de la disciplina en el territorio, trató temas medulares como la estructura de competencia para la venidera Serie Nacional, el proceso de contratación de jugadores en ligas foráneas y las fortalezas y debilidades del trabajo en las diferentes categorías en la provincia.

Sobre el primer tópico, el federativo afirmó que la 56 edición de nuestro clásico nacional comenzará el próximo siete de agosto y extenderá su etapa clasificatoria hasta inicios del mes de noviembre.

"Durante esta primera fase se jugará con 16 equipos, de manera que se respete la identidad y el amor a la camiseta de cada provincia. Terminada esta etapa clasificarán directamente a playoff los primeros cuatro y del quinto al octavo disputarán los otros dos cupos", aseveró.

El torneo culminará el 25 de enero de 2017 y el seleccionado ganador será el encargado de representar a Cuba en la Serie del Caribe.

Con respecto a la contratación de peloteros cubanos en el extranjero, se conoció que son 13 los que en la actualidad militan en ligas profesionales principalmente de Japón y Canadá.

"La cifra es aún insuficiente y los jugadores nuestros están participando en ligas a veces con un nivel menor al de AA, porque hasta la fecha no hemos llegado a acuerdos con las Ligas Mayores", sentenció Suárez.

Preguntado por el futuro de los atletas que han regresado al país y solicitaron reintegrarse a la Serie Nacional, el presidente de la CNB aseguró que se estudian variantes para permitir la reinserción a quienes salieron legalmente del territorio nacional y al hacerlo no incumplieron sus contratos con el país.

"En esta situación se encuentran 26 deportistas, pero aún no hemos tomado una decisión al respecto, debemos lograr una simetría en este aspecto, por lo pronto habrá que esperar unos meses".

Una vez se apruebe esta política, los jugadores que abandonaron ilegalmente el territorio nacional o lo hicieron irrespetando el contrato con sus planteles, cumplirán una sanción de uno a dos años de suspensión.

"En el caso de aquellos que no se encuentren en estas circunstancias, las comisiones provinciales se reunirán y los dejarán jugar los torneos provinciales y la Serie Nacional".

En la reunión se hizo un balance además, de los resultados de la provincia en las diferentes categorías competitivas en el año 2015 y se evaluaron las limitantes que atentan contra el máximo espectáculo deportivo en Cuba.

El pasado año lo más llamativo en cuanto a resultados para Vueltabajo fue el subtítulo obtenido en la categoría Sub-15, el cuarto lugar en el Campeonato Nacional Femenino y el quinto en el de mayores, actuación que le valió la sexta posición integral a nivel de país.

"Nos sigue quedando una deuda con la categoría Sub-23 en la que hemos quedado rezagados durante las dos series desarrolladas hasta ahora", aseveró Julio Alberto Candelaria, director de la Comisión Provincial de Béisbol.

En el debate se reconoció, no obstante, el esfuerzo hecho por entrenadores, activistas, árbitros y directivos del béisbol en la más occidental para desarrollar una Serie Provincial de calidad, un reto que no cumplen de igual forma otras provincias.

Como dificultades que continúan atentando contra el espectáculo, Heriberto Suárez mencionó, entre otras, el irrespeto del público, jugadores y técnicos hacia los árbitros; las carencias de implementos deportivos y el creciente número de deserciones de atletas.

Solo en Pinar 27 peloteros, 18 de ellos de primer nivel, abandonaron durante el 2015 y lo que va de 2016 las filas de sus equipos, en busca de hacer carrera en el béisbol profesional.

Por último, se enfatizó en la necesidad de rescatar los "beisbolitos" como iniciativa temprana para la práctica de esa disciplina, estandarizar las dimensiones de los cajones de picheo y hacer uso de la ciencia y la sabermetría en la preparación de técnicos y jugadores desde la base.