La cita era para las 10.00am. Llegué un poco tarde por la causa que todos sabemos, pero a pesar de eso, ahí estaba mi entrevistado; sentado en un cómodo butacón. Cuando me vio en el dintel de la puerta me dijo: “Pasa, vamos a conversar” y apenas tomé bolígrafo y papel para la entrevista, me dijo: “Mira esto” y puso en mi mano dos libretas de abastecimiento. En todas las hojas, desde la primera hasta la última, un sello en tinta roja: CANCELADA

Siro Cuartel: Coño, ¡al fin la llenaron! Si vieras la mía..

Lourdes Gourriell: La tuya mal que bien aún sirve para el pan, el arroz, los chícharos, el azúcar, la sal, el..la..bueno, dejemos eso. ¿De qué vale hablar de lo que ya no tiene remedio?

SC: ¿Y todos estos cuños te los puso en un mismo día?

LG: ¡En cinco minutos! ¡Me quedé estupefacto! En este país llevamos ya como no sé cuantos años buscando la fórmula para ir desapareciendo gradualmente la libreta, para no herir susceptibilidades, y esa mujer, en cinco minutos, resolvió el problema.

SC: Dame su nombre, la voy a proponer para que vaya a trabajar en otras esferas más arriba. Con Murillo, con Georgina..

LG: Siro, ya Georgina no existe. Ahora es Lina

SC: Bueno, con Lina.. si se lo merece, la propongo incluso para que trabaje en “el más allá”.

LG: Coño Siro, dejemos eso..te he traído por otra cosa. Dime, ¿cómo viste a mis hijos? ¿más flacos? ¿se alimentan?

SC: Muchachoo..

LG: Este otro acá se me pasó días sin comer. Tampoco quería volver a jugar béisbol, pero lo convencí y salió el fin de semana. ¡Si vieras como lo aplaudían! Y él pensaba que lo iban a abuchear.

SC: Este es un pueblo culto Lourdes, formado en los más altos valores. Eso sin dudas debemos agradecérselo a…

LG: Yo estoy muy triste Siro. Los otros días me llamó Roberto Carlos y me dijo: “¿Qué será de ti?”

SC: ¡No jodas! ¿Roberto Carlos el cantante brasileño?

LG: No, Roberto Carlos el basketbolista. Me llamó para darme ánimos. Me dijo: “Tranquilo Lourdes, que yo y mi hermano también nos quedamos, y mi padre siguió de Comisionado Nacional”

SC: ¡Muy cierto!

LG: Temo por mi historia. Según supe, quieren quitarme el título de Héroe de Parma. De hecho ya están escribiendo por ahí “cositas”

SC: No le hagas caso a nadie, … ¿pero cómo pudieran hacer eso?

LG: Lo van a hacer, lo que pasa es que no saben a quien dárselo. ¿A Vargas? Está en Miami. ¿A Euclides? En Miami también

SC: Arocha, Pedro Luis Rodriguez… Kindelán dio jit, Padilla corrió por él… base por bolas a Víctor… oye, eso te toca a tí, o en todo caso a Vargas.

LG: Con Vargas en Miami, y esto de mi hijo, creéme Siro, Parma se quedó sin héroe.

SC: No te aflijas… ¡nadie te podrá quitar el título de hombre más oportuno del béisbol cubano.

LG: ¡Eres un soñador Siro! ¡Hasta eso pueden quitarme! Los estadísticos pueden borrar los números con una facilidad espantosa. Donde dí un jonrón pondrán que dí un fly al catcher; donde di un jit, pondrán que me ponché. ¡Me borrarán! Los Piti Rivera, los Benigno Daquinta…

SC: Pero… ¿pueden hacer eso? ¿Son ellos quienes deciden?

LG: No creo que sean ellos quienes decidan, pero pregúntale a Arocha, a Euclides, a Contreras… si pueden o no pueden hacerlo.

SC: ¡Yo hablaría con Daisuki González! ¡Con Oscar Portales!

LG: Los otros días sorprendí a un periodista hablando… dice que lo sucedido es culpa mía. Que no le inculqué bien los valores políticos ideológicos a mis hijos. Pero dime Siro, tú que eres amigo de esta familia desde que esos niños nacieron… ¿de qué valores hablan? ¿qué valores? Si aquí hace par de años hablaban peste de Pito, de Puig, y ahora los recibieron a toda leche?

SC: Sniff, Sniff…

LG: ¿Qué valores – digo yo – si mi hijo vivía en la más absoluta austeridad, mientras el yate del hijo pródigo navegaba por el Mediterráneo? ¿De qué valores me hablan?

SC: Coño compadre, no me hagas llorar más… Dime, ese seguro que fue Roberto Pacheco. Vaya digo yo..con tantos periodistas deportivos buenos que hay en este país, y ese hombre… ¿hasta cuándo ese hombre piensa viajar?

LG: Oye Siro, si Julita fue hasta Moscú en muletas…

SC: Y luego fue de turista a Miami, y se puso a entrevistar a Víctor Mesa. ¡Violando status migratorio! Y ahora, pa colmo, a otros les ha dado por la literatura; no, si yo te digo a ti… ¡se le ha perdido el respeto al periodismo deportivo!

LG: Desde que Jorge Ebro se fue ya nada es como antes.

SC: No Lourdes, ya nada es como antes… por suerte, para ti, para tus hijos… ¡ya nada será como antes!