Hay cosas a las que uno termina acostumbrándose, otras no, pero como dice mi amigo José Antonio Reyes Zamora, ‘quien se adapta perece’, por lo que me niego a adaptarme y mucho menos a perecer, no es mi naturaleza. ¿Qué ocurre con Yulieski Gourriel? No estamos al corriente de la verdad, pero merecemos saber y es un derecho que se nos ha negado.


Conocemos hasta el cansancio que la Federación Cubana de Beisbol no es confiable, sino un organismo titiritero, encubridor y desleal a la afición y los peloteros que deben representar, a la vez que la prensa en la isla está muy limitada, desde sus opciones de movilidad hasta la censura, que comienza en reuniones donde les dicen ‘esto no se puede publicar’.

Esas dos razones son suficientes para que Cuba funcione por puros rumores, mientras llega lo inevitable, si es que lo inevitable se puede publicar (por mi cuenta para Cuba el Muro de Berlín aún no se ha caído).

De Yulieski Gourriel sabemos que decidió no presentarse en el concentrado del equipo Cuba al Tope contra Estados Unidos y los Panamericanos. A partir de allí, nos enteramos que se personó al entrenamiento con Industriales, donde inclusive el nuevo manager Azul, Javier Méndez, expresó en ese momento que no tenía ninguna instrucción adversa que le impidiera estar con el equipo, además que era pilar fundamental para la próxima temporada.

Semanas después nos enteramos, a través del Nuevo Herald (No Granma, no Trabajadores, no Jit, no OnCuba, sino el Nuevo Herald), que Yulieski había pedido la liberación de Industriales también, por lo que asumimos todos que el estelar jugador llegó al punto de tener intereses irreconciliables con la Federación y con el gobierno en Cuba.

Todo esto ocurriendo sin tener ni una palabra de los medios de prensa cubanos, que como siempre, se han quedado a la expectativa para replicar noticias, una vez que estén autorizados a hacerlo.

De hecho los colegas en la isla con los que he podido conversar del tema, me han insistido que Yulieski no quiere hablar con nadie, derecho que se merece y le respetamos, a la vez que cuando he preguntado sobre exigirle a la Comisión una respuesta, me han dicho: “Dany, tu sabes cómo funciona eso”

Resumiendo, oficialmente nada sabemos.

Se habla que su ruptura con la Federación se debió a la ausencia de Lourdes Gourriel Jr. en la preselección a los Panamericanos.

Se habla que Japón trajo una contra oferta y la Comisión no le pasó la voz, cosa que conoció a través de una llamada de su representante en la tierra del sol naciente.

Se habla de varias teorías que le podrían conseguir residencia en un tercer país, cosa lógica, ¿Pues si el pelotero más popular, perseguido por scouts y promocionado de la última década del beisbol en Cuba no tiene esa capacidad, quien la tendría?

Se habla y se habla, pero nada está claro. No hasta que se dé el milagro y este caso deje de estar bajo el control de la censura en Cuba

La situación del antesalista está siendo colegiada en los más altos niveles del gobierno, pues no existe un mecanismo que pueda prohibirle al espectacular jugador su salida de Cuba, una vez que tenga visa de otro lugar, mientras que si planta residencia en un tercer país, se convierte automáticamente en elegible para las 30 franquicias de las Grandes Ligas de Beisbol.

El gobierno, en una jugada inimaginable, autorizó a todos los ciudadanos cubanos a salir del país hace un par de años, eliminando la infamia conocida como ‘carta blanca’ y los resultados han sido alarmantes pero lógicos, no obstante el deporte, en especial el beisbol, ha visto como se han marchado de la isla innumerables atletas y Yulieski Gourriel pudiera ser el clímax de esta situación, pues si el ‘Yuli’ se marcha y finalmente rompe con Cuba, cualquier cosa puede pasar después.

Esto superaría la salida de José Ariel Contreras y Antonio Pacheco como los más grandes escándalos, ya que todos fueron, en su momento, estandartes del gobierno cubano, pero que evidentemente decidieron por sus vidas más allá de la doctrina.

Nunca confundir el amor a la patria, pues traidores bien pudieran ser los que cierran los ojos y permiten que la tierra que los vio nacer se derrumbe delante de ellos sin hacer nada.

Los términos patriota y traidor han sido muy mal utilizados a conveniencia de las autoridades por el último medio siglo.

Cerrando y para completar la desinformación y mentira que se vive en Cuba, les dejo con un razonamiento:

¿Cómo se explica que a Lourdes Gourriel Jr. se le congeló un contrato en Japón por no presentarse, con una presunta lesión y ahora esté en Holanda con el equipo Cuba?

Sencillamente algo más ocurrió en ese caso, pero la grosera Federación nos trata como imbéciles desmemoriados y después exige respeto como si lo mereciera.

Tanta mentira ha acabado con nuestra pelota, no me queda otra manera de verlo.

Sin más por ahora,

Daniel de Malas Andreu